sábado, 13 de marzo de 2010

En sus zapatos

No es por tomar una posición de superada, pero: Nunca probaron poniéndose en el lugar del otro?

Es un ejercicio buenísimo. No digo que sea fácil, pero si tomamos conciencia de cuanto más simples serían muchas cosas practicando la empatía, seríamos todos mucho más felices.

No te cansás a veces de enredarte en discusiones larguiiiisimas y sin sentido, en las que nunca lográs ni un mínimo acuerdo? no te cansas a veces de tratar de imponer tu punto de vista como si fuera la única verdad absoluta? O de quedarte ahí estaqueado, con la boca abierta porque no entendés el accionar o el pensar de los demás?
Simplemente intentalo una primera vez, como ejercicio aunque sea.
Ponete en el mismísimo lugar del otro, pero en su piel en serio...tratá de ver a través de sus ojos, en el marco de sus circunstancias y vas a ver como los caminos se bifurcan o trifurcan y las respuestas cambian de color y de sentido como de personas.
No es que vas a cambiar de parecer o a pensar distinto, pero si vas a entender mejor el porque de la postura del otro y eso te va ayudar a no desperdiciar energía donde no se debe.
En la práctica de la empatía no hay absolutismo que valga, todos tenemos un poco razón, porque todos tenemos nuestras razones.
Estaría bueno poder incorporarla como una práctica diaria hasta convertirla en un hábito, y así nuestras discusiones se convertirían en charlas pobladas de acuerdos y puntos de vista coincidentes, y no porque primó un pensamiento hegemónico, o la voz del más fuerte, sino porque se construyó una verdad nueva con muchos pedazos de razones distintas.
Si ya se.... es utópico, pero no por eso deja estar buenísimo.
Simplemente intentalo una primera vez, como ejercicio aunque sea...

1 comentario:

Unknown dijo...

Me encantó esta reflexión! simple, facil y esencial. ..y no tan utopico.