Y en lugar de tu bar...

Solo los cordobeses me sabrán entender... bueno solo aquellos cordobeses que hayan disfrutado alguna noche de folklore y fernet en María - María.

Hace poco estuve en mi Córdoba natal, pasando unas cortas vaciones como consecuencia de la nueva política de feriados que Cristina nos supo dar... más unos días de licencia laboral que tenía en mi haber.

Asique no fue como cualquier ida a Córdoba, que generalmente se reduce a un fin de semana corriente, esta vez pude volver a caminar por la ciudad un lunes cualquiera y sumarme a la rutina semanal Córdobesa que ya tenía olvidada.

El martes, por ejemplo, bajé caminando por Hipólito Yrigoyen desde la Iglesia de los Capuchinos hasta la calle Obispo Trejo, por donde seguí bajando atravesando toda la peatonal... doblé en 25 de mayo y de ahí hasta la calle Rivdavía, donde está la iglesia de la Merced... así es Córdoba... llena de Iglesias que sirven como mojones de referencia geográfica.

En el transcurso de esta caminata de no más de 20 cuadras me cruzé con: Amigos, compañeros de la facultad, compañeros del secundario, primos y algún conocido de los tiempos de trasnoche adolescente ... me gustó esto, hacía mucho que no lo vivía.

Caminar por ahí no solo me llevo hacia gente conocida, también y en la búsqueda de efectivo, me encontré con una sucursal nueva de Banco Galicia, ¿que donde estaba?... en el exactísimo lugar en donde años atrás supo estar María - María, ese Bar que hoy motiva estas líneas.

A medida que me iba acercando al Banco, se me vinieron a la mente muchos recuerdos felices, de los tiempos en que con amigas íbamos a este lugar en donde nos divertimos mucho una buena parte de nuestra época universitaria.

Además de los recuerdos, y casi como un acto reflejo también se vino a mi mente esa canción de Sabina en la que él, después de un tiempo, vuelve a un pueblo a buscar a una chica "y en lugar de su bar encontré una sucursal del Banco Hispanoamericano"... y solo ahí, en ese momento me vino un poco la tristeza, no tanto por mi, sino por Córdoba que perdió un lugar en donde se respiraba lo bueno de nuestra música y en donde todos eramos iguales.

Bueno era esto nada más... un mini homenaje a Sabina y María - María.

Le Elo, la Mery y la Lore pueden dar fe.